
El Servicio de Neurología del Hospital Vega Baja de Orihuela participa en un proyecto internacional que logra por primera vez que una mujer ciega sea capaz de percibir información visual mediante un implante cortical.
“Quedarse ciego en una etapa tardía de la vida plantea un reto enorme. Hay que aprender un nuevo modo de vivir. Traspasar el punto de gravedad de la visión a otros sentidos. Sin embargo, la experiencia visual va más allá de nuestros ojos, se construye en el cerebro y el cerebro mantiene su capacidad adaptativa. Esto nos animó a iniciar este proyecto, a preguntarnos si sería posible, utilizando nuevas tecnologías, conseguir que una persona ciega adquiera, de nuevo, información visual útil para interactuar con su entorno”. Así describe la Dra. Arantxa Alfaro, neuróloga del Hospital Vega Baja de Orihuela, miembro de la SEN y miembro del grupo de Neuroingeniería Biomédica de la Universidad Miguel Hernández, las motivaciones del estudio “Visual percepts evoked with an Intracortical 96-channel Microelectrode Array inserted in human occipital cortex” recientemente publicado en la revista Journal of Clinical Investigation.
En este trabajo se resume la primera experiencia con un implante cerebral basado en microelectrodos intracorticales localizado en la corteza visual de una persona ciega. El dispositivo consiste en una pequeña matriz tridimensional de 100 microelectrodos que permite tanto la estimulación directa como el registro de señales eléctricas. El sistema completo de estimulación incluye, además, una retina artificial que emula el funcionamiento del sistema de visión humana, situada dentro de unas gafas convencionales. Esta retina artificial capta el campo visual situado frente a la persona y lo transforma en trenes de impulsos eléctricos optimizados para estimular las neuronas de la corteza visual a través de la matriz de electrodos. Durante seis meses, los investigadores realizaron diferentes experimentos en los que la voluntaria fue capaz de aprender a reconocer distintos patrones con los que localizar objetos, reconocer letras e incluso llevar a cabo, con el entrenamiento adecuado, tareas más complejas que exigían cierta destreza, como jugar al clásico “Comecocos”.
A día de hoy el proyecto sigue abierto con el reclutamiento de nuevos voluntarios ciegos para participar en estos experimentos. En próximos estudios, esperan utilizar un sistema codificador de imágenes más sofisticado, para estimular simultáneamente un mayor número de electrodos y así reproducir imágenes más complejas.
En este trabajo, además del Servicio de Neurología del Hospital Vega Baja, han participado investigadores del Grupo de Neuroingeniería Biomédica de la Universidad Miguel Hernández, del Centro CIBER de Investigación en Bioingeniería, Biomateriales y Nanomedicina, del Netherland Institute of Neuroscience en Holanda y del John A. Moran Eye Center at the University of Utah en Estados Unidos. El proyecto ha sido financiado por el Programa Prometeo para Grupos de Investigación de excelencia de la Generalitat Valenciana, por el Instituto de Salud Carlos III, por el Ministerio de Ciencia e Innovación y por la Comisión Europea, dentro del programa H2020.
Enlace al artículo:
“Visual percepts evoked with an Intracortical 96-channel Microelectrode Array inserted in human occipital cortex”. Fernández E, Alfaro A, Soto-Sánchez C, González-López P, Lozano-Ortega AM, Peña S, Grama MD, Rodil A, Gómez B, Chen X, Roelfsema PR, Rolston JD, Davis TS, Normann RA. J. Clin Invest. https://doi.org/10.1172/JCI151331
Enlace al Proyecto CORTIVIS:
https://clinicaltrials.gov/ct2/show/NCT02983370
Enlaces a vídeos relacionados:
https://youtu.be/t5sEmu5lDQM
https://youtu.be/a1K2zlHUQlo